Alza se produciría entre los años 2016 y 2018:
Según Systep, durante el período 2010-2011, el precio de la energía contratada acumuló alzas del 45%, lo que se tradujo en aumentos cercanos al 30% para clientes residenciales.
Por: Miguel Concha M. – 03/10/2013
Fuente: Impresa El Mercurio
Alta incertidumbre existe en el mercado eléctrico sobre el resultado que tendrá el proceso de licitación de contratos para clientes regulados que está llevando adelante la Comisión Nacional de Energía (CNE). Los altos precios de la energía y la falta de nuevas centrales han provocado dudas entre los generadores, quienes ven que el precio techo de US$ 129 por MWh puede ser riesgoso a la hora de cumplir con suministros de largo plazo.
Esta situación llevó al Gobierno a evaluar que los contratos se indexen al costo marginal -precio de generación de la unidad menos eficiente y la más cara del sistema- como un incentivo para que las eléctricas se presenten al proceso entre 2016 y 2018. De concretarse esta fórmula, los precios de la energía contratada podrían sufrir una fuerte alza, tal como sucedió entre 2010 y 2011, cuando los contratos de las distribuidoras fueron asociados al costo marginal.
De acuerdo a un análisis de la consultora Systep, durante esos dos años el valor promedio de la energía acumuló alzas de hasta 42%, lo que se tradujo en aumentos en las cuentas de la luz. Así, mientras inicialmente el precio establecido para los contratos era de US$ 71 por MWh, con la indexación a costo marginal dicho valor se encumbró sobre los US$ 101 por MWh.
La diferencia implicó a la postre incrementos cercanos al 30% en las tarifas de clientes residenciales, pues el precio de la energía derivado de sus indexadores representa cerca del 70% del cálculo final de la tarifa de las cuentas de la luz. Además, Systep sostiene que a partir de 2012 las variaciones de precio fueron en promedio 10%. Esto, porque desde esa fecha fue eliminada la indexación a costo marginal.
Según explica el director ejecutivo de Systep, Hugh Rudnick, el escenario que se vivió entre 2010 y 2011 podría replicarse entre 2016 y 2018, en caso de que el Gobierno decida incluir el marginal en el cálculo del precio de la energía. Esto último, si se registran valores de la electricidad en el mercado spot cercanos a los US$ 200 por MWh, como ha sucedido en el último año debido a la sequía y la falta de generación eficiente.
A su vez, fuentes del mercado eléctrico confirman que la introducción del costo marginal elevará aún más las tarifas de los clientes si se tiene en cuenta que estas subirán solo considerando el precio techo de US$ 129 por MWh. Los contratos actuales tienen un valor promedio de US$ 80 por MWh.
Entre las empresas también ven como factible un aumento del 30% en las cuentas de la luz, de introducirse a la fórmula de cálculo del precio de la energía el costo marginal.
Fuente / El Mercurio