En la primera parte del año, en el ex SING se produjeron 188 horas de costo marginal cero. Si bien esa cifra bajó en los meses de invierno, el fenómeno se volvería a producir este verano.
Uno de los hitos más relevantes en el desarrollo eléctrico chileno fue la interconexión del SIC y el SING, que pasaron a constituir un único Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Diez meses después de dicho evento, los efectos han sido diversos. Dentro de los más llamativos, de acuerdo con un análisis que elaboró la consultora Systep, son los cambios en los precios de la electricidad en las regiones III y IV, es decir, en el norte del antiguo SIC.
En dichas zonas, una vez que los sistemas se unieron, se percibió un aumento en los costos marginales promedio de US$18,6 y US$11,5 por MWh, respectivamente, lo que significa aumentos del 56% y 36% respectivamente.
Esto se debe a que previo a la interconexión, durante varias horas del día, el sistema operaba a costo marginal $0. Pero tras ese hito, y dado que la energía se puede exportar al SING, ya no hay exceso de energía y esta se puede evacuar. “El costo quedó más alineado con el norte”, explicó el gerente general de Systep, Rodrigo Jiménez.
Sin embargo, el costo cero se trasladó al ex SING. Allí, en la primera parte del año se observaron 188 horas con costo marginal cero. Y si bien esa cifra bajó en los meses de invierno, desde Systep advierten que la alta radiación del verano podría hacer que ese efecto se repita.
Vertimiento de energía
Otro efecto importante del SEN fue la reducción de vertimientos en las centrales ERNC. En el caso de los solares, bajaron de 24% en abril de 2017 a 5% en 2018. En el caso de la energía eólica, la baja fue de 12% a 3%.
En el escrito se destaca que la totalidad de los beneficios de esta interconexión sólo se podrán apreciar cuando esté 100% operativa la línea Cardones-Polpaico. Esto debiera producirse en dicimbre, según InterChile, la empresa a cargo de la obra.